En esta fábula se aprende esto: Si estás bien, no necesitas cambiar de casa, ni de cole, ni de estilo de vida.
A Chip, famoso ratón, que vivía en la ciudad — le invitó su primo un día a venirle a visitar.
Su linda casa en el prado podría así conocer – y él acudió a visitarlo con agrado y con placer.
El primo Chap le ofreció zanahoria y saltamontes – escarabajos, tomillo, lechuga y algunos brotes.
Chip se burló de su casa y de vivir bajo el suelo: – “Yo en un armario ropero vivo tan bien como quiero”.
Dijo Chip a Chap: muchacho: si te quieres divertir – Haz como yo: ven a casa, y quédate allí a vivir.
Así que al día siguiente, invitado por don Chip – Llegó Chap a su mansión, con salones y jardín.
Pero justo ante la entrada, con sus bonitos jardines – salían a pasear los dueños con sus mastines
Los dos perros, muy feroces se tiraron a cazarlos – Chip y Chap se escabulleron; no lograron alcanzarlos.
Muertos del susto los dos escaparon enseguida – y Chap le dijo a su primo, marchándose a su guarida:
Qué bonita es la ciudad si te quieres dar el gusto – pero prefiero la paz a que me maten de un susto.
Y Chap así se marchó al prado de su agujero – para vivir bien feliz en su cuevita del suelo.
Si quieres vivir tranquilo, sin sustos y sin problemas–confórmate con tus cosas y no envidies las ajenas.
FIN
Adaptación de la fábula © Mª Teresa Carretero